El 14 de febrero se celebra San Valentín, una de las efemérides más esperadas, sobre todo por el alumnado adolescente, que empieza a tener sus primeras relaciones amorosas. Es una opción interesante aprovechar esta fecha señalada en el calendario para trabajar con ellos valores como la igualdad, el respeto y la tolerancia, tanto en el amor como en la amistad, y desterrar los mitos del amor romántico.
Tenemos millones de recursos a nuestro alcance para poder tratar estos temas en los diferentes cursos de manera entretenida. Empecemos con el alumnado de Infantil.
A veces parece que con los más pequeños es difícil tratar temas de calado como puede ser el amor. Pero lo cierto es que las niñas y niños pequeños todavía no tienen los prejuicios que se van adquiriendo con el paso de los años. Por eso, les calan más fácilmente los mensajes de igualdad.
Por eso, podemos hacer una asamblea hablar sobre a quién queremos y como lo demostramos. También podemos hablar sobre los límites a la hora de tocar o dar besos a los demás. Y si queremos contar algún cuento, os dejamos por aquí algunas propuestas:
Martín y su osito Luis juegan cada día. Muchas veces los acompaña su amiga Ada. Pero un día, el osito está triste. ¿Niño o niña? Solo uno mismo sabe qué es y cómo se siente, y ante eso, lo más importante de todo es la amistad. Una historia conmovedora, dulce y tierna sobre ser uno mismo.
Un día, el viento encontró una carta perdida. La lluvia había borrado las letras del sobre y no se podía saber para quién era ni quién la había escrito. Pero la carta decía unas palabras preciosas: «Te quiero». Por eso, el viento la hizo volar alto alto y la empujó fuerte, muy fuerte. La carta encontraría su destino y haría que alguien se sintiera querido. Pero el viento no podía imaginarse que la carta caería en la cabeza del Sr. Gato, siempre malhumorado y encerrado en casa. ¿Siempre? Tal vez la fuerza de las palabras pueda cambiar su vida. Una historia sobre la confianza hacia las personas que nos rodean, un canto en favor del cariño entre la gente.
A menudo nos sentimos poca cosa, pero si miramos a las personas que nos rodean, nos daremos cuenta de que podemos ser grandes, muy grandes. Los gestos más pequeños son importantes y dan pie a acciones gigantes. Cada uno de nosotros puede marcar la diferencia. A través de la mirada de una niña es como mejor valoramos la grandeza del mundo, que nos emociona y nos transforma.
¿Cómo podemos trabajar este tema en Primaria? Una idea podría ser ver la película de Frozen con el alumnado. Esta historia no solo pone en valor la importancia del amor entre hermanas, sino también conciencia sobre el papel de los supuestos príncipes azules.
Otra película con la que podemos reflexionar es Brave. En esta película la princesa no se comporta como se espera de ella. Ella quiere pelear y no está interesada en casarse. ¿Qué opina nuestro alumnado al respecto? Las niñas pueden ser lo que quieran, y no tienen por qué enfocar su vida al matrimonio.
Para hablar sobre los límites podemos leer Cuaderno de besos. Se trata de un cuento sobre los límites del propio cuerpo y la importancia de no besar ni permitir que nos besen sin consentimiento.
Tal vez la adolescencia sea el momento más crítico para hablar de amor. Es la época en la que empiezan las relaciones de pareja y también los primeros casos de maltrato. Por eso pensamos que es importante implicar a los departamentos de orientación de los institutos a la hora de tratar estos temas en profundidad.
Os dejamos esta guía elaborada por el Consejo de la Juventud de Navarra en la que encontraréis maneras de tratar el amor romántico en clase.
Después de leerla podemos hacer un debate en clase y hablar sobre como pensamos que debería ser una buena relación de pareja, pero también como se debe cuidar de las amistades.
Otra propuesta es escuchar en clase una de las canciones que estuvo más de moda hace unos años: Lo malo, de Aitana y Ana Guerra.
Podemos analizar la letra de esta canción y hablar sobre si nos sentimos identificados o identificadas con ella, o qué pensamientos nos suscita lo que cuenta la letra.
Por último, en colaboración con la asignatura de plástica, podemos hacer un gran buzón para que escriban cartas de amistad a los demás. Por sorteo, como si fueran los papeles del amigo invisible, cada uno tendrá que escribir una pequeña carta a la persona que le toque lanzando un mensaje de cariño. La idea es obligarles a reflexionar sobre lo bueno que tiene las otras personas, independientemente de lo estrecha que sea su relación.