Como bien sabréis, el temporal vivido en algunos lugares del país ha provocado que algunas poblaciones hayan sido arrasadas por el agua, dejando así centenares de víctimas. Todo esto ha generado situaciones llenas de miedo, tristeza y desesperación, y tanto los adultos como los niños nos hemos visto desbordados por la incertidumbre.
En una situación como esta, es importante hablar con los niños sobre cómo se sienten y que les demos respuesta a cualquier duda que puedan tener, tanto si han vivido el temporal en primera persona como si han sido testigos por las redes sociales o los medios de comunicación.
Para poder ayudar a los más pequeños de un tema tan delicado, es fundamental cuidar de uno mismo, tal y como recalca UNICEF. Por eso, lo principal es descansar, hablar con otros adultos y aceptar que es natural sentir incertidumbre, rabia o miedo en una situación de crisis. Además, es importante mantener la rutina en familia y estructurar el día dentro de lo posible.
El Consejo General de la Psicología de España (INFOCOP) ha creado una infografía en la que se resumen hábitos saludables que debemos tener en cuenta en el contexto actual. La podéis consultar aquí.
Intentar identificar signos de estrés es muy importante para poder actuar de la mejor manera posible, ya que es posible que algunos niños presenten pesadillas, mutismo u otro tipo de comportamientos. Hay que tener presente que existen numerosos profesionales que pueden echar una mano en este tipo de situaciones.
Teniendo esto en cuenta, es fundamental validar las emociones que nos expresen. A muchos niños les resulta difícil expresar emociones complejas, como el miedo o la tristeza. Por ello, hay que explicarles que todos los sentimientos son válidos para que se sientan comprendidos.
Además, la sinceridad y la claridad son clave para poder hablar con los niños a través de algunas estrategias, como las que propone UNICEF, entre las que destacan la importancia de conversar desde la empatía, pasar tiempo con ellos y mostrarles afecto, observar sus cambios emocionales, mantener rutinas y practicar ejercicios de relajación. Podéis leer el artículo completo aquí.
Save the Children, por su parte, destaca la importancia de respetar los tiempos y las necesidades de cada niño, ya que no todos procesan la información de la misma manera. También es fundamental poder adaptar el lenguaje y la información transmitida a la edad del niño o niña. Por ejemplo, con los más pequeños es preferible no usar palabras alarmantes sin una explicación adecuada e, independientemente de la edad, es importante incluir esperanza en los mensajes que transmitamos. El artículo completo de Save the Children está disponible aquí.
Realizar algunas actividades tanto en casa como en el aula puede ser muy útil para que los niños y niñas puedan gestionar mejor la situación. Os proponemos algunas ideas:
La web Sapos y princesas, un proyecto dirigido a familias que se encarga de la difusión de contenidos educativos, propone más ejercicios que podéis trabajar con los más pequeños. Podéis leer el artículo completo, en el que también aportan claves para explicar la DANA a los niños aquí.